Estamos de enhorabuena este comienzo de año. Cito del comunicado hecho público por ETA, que está disponible, en pdf, en la edición digital de El País de hoy:
"ETA ha decidido declarar un alto el fuego permanente y de carácter general, que puede ser verificado por la comunidad internacional. Este es el compromiso firme de ETA con un proceso de solución definitivo y con el final de la conforontación armada".
La considero una noticia excelente, largamente esperada y probablemente, esta vez, auténtica: ojalá se cumpla y no se trate, como en anteriores ocasiones, de un engaño.
La pancarta dice "Bakea nahi dugu!" ("¡Queremos la paz!")
Me gustaría acabar con una cita (disculpad, de memoria, y tal vez infiel): en una viñeta para El País, publicada hace años, el humorista Máximo, colaborador para el diario en aquel entonces, describía el terrorismo dando la vuelta al principio "el fin justifica los medios" (siempre autoritario y generador de injusticias). Máximo nos advertía: "Algunos medios envilecen los fines".
Las crisis también afectan a los asesinos. ETA no iba a ser menos, o más, según se mire. Y a eso responde esta decisión de los terroristas: a la crisis, en todos los ámbitos que abarque la palabra (político, social, económico... hasta espiritual).
ResponderEliminarLa declaración de tregua no es consecuencia de una apelación a argumentos o principios (si es que los asesinos son capaces de tener argumentos y/o albergar principios). Tampoco se trata de una estrategia.
Simplemente... sienten la crisis. Ni más ni menos.
Por eso, la tregua será tan duradera como lo sea la crisis para ellos. Además, será directamente proporcional a la torpeza e incompetencia de los gobernantes al respecto, es decir, a más torpeza con el nacionalismo vasco, menos tregua. Por último, seguirá dependiendo (como siempre) del apoyo popular al terrorismo, que en Euskadi-Navarra se sitúa en torno a las 125.000 "personas".
De todo eso depende la tregua. Mi intuición: volverán a matar.
Yo creo que es el principio del fin. O quizás el principio del fin fue hace ya algún tiempo y ahora estamos viviendo el primer capítulo de un fin que puede ser largo. Pero ya estamos ahí. Y eso es mucho.
ResponderEliminarSusana: la violencia es una espiral. Creo que el único modo de acabar con ella, con todas sus ramificaciones y tragedias, es una negociación sincera (pero no incondicional: las responsabilidades por los delitos de sangre, por ejemplo, no son negociables). Claro que la sinceridad de ETA brilla por su ausencia, y tienes sobrados motivos para desconfiar. Pero recuerda lo que sucedió en Irlanda del Norte. ¿Por qué no en España?
ResponderEliminarCésar: sí, puede ser muy largo...